RESTAURANTE CAMIÑO DO INGLÉS

Con la idea de generar un local en el que se disfrutase de la comida en todo momento, se parte de una cocina con una barra abierta en el centro del local para que el cliente se vea inmerso en el proceso creativo del plato.
La privacidad de cada una de las mesas se consigue focalizando la luz en ellas con puntos orientables, añadiendo además una iluminación más general para generar un segundo ambiente que se percibe desde el exterior.
La fachada de u-glass consigue que desde la propia calle se intuya el local, sin que realmente se sepa lo que sucede dentro generando una atmósfera agradable y enigmática.
El aire industrial de los materiales de los paramentos y las instalaciones vistas, unidos a un mobiliario de madera con colores cálidos crea un ambiente acogedor y sociable.

Fotografía: Wifre Meléndrez